Mucha desinformación y poca información
La pandemia en la que estamos inmersos desde hace prácticamente un año ha maximizado multitud de situaciones, multitud de carencias de las que éramos conscientes, pero que se han hecho mucho más visibles en los últimos meses. Sin duda, una de ellas es la cantidad ingente de información que recibimos respecto a la propia situación sanitaria, información que nos llega prácticamente en tiempo real, y en muchas ocasiones, sin filtros, sin contraste y sin ser objetivada, características mínimas para que la información sea creíble.
En CFP IN como Servicio de Prevención, no somos ajenos a esta situación que afecta además a nuestras empresas cliente y a sus plantillas, pues generalmente, las diversas informaciones les llegan a través de diversos instrumentos y sin fuentes fidedignas en las que poder apoyarse.
Ante esto y teniendo en cuenta que hablamos de algo tan serio y tan sensible como es la salud, no sólo física sino también psicología, nos vemos obligados como empresa responsable que somos, a contribuir al cribado de la información para que la que se ofrece a través de nuestros distintos canales de comunicación, sea veraz y transparente en temas como:
- Las medidas preventivas (higiene correcta de manos, utilización de mascarillas y guantes, limpieza en centros, higiene personal, el valor de las medidas de distanciamiento físico y de otras recomendadas durante la actual situación pandémica por las autoridades sanitarias etc.).
- La utilidad de los diferentes test diagnósticos y su interpretación adecuada; La indicación adecuada para realizarlas. Ya que desgraciadamente estamos asistiendo a comportamientos oportunistas, nada éticos, por parte de quienes aprovechan la situación de incertidumbre y miedo de las personas durante la pandemia, para lucrarse económicamente, realizando pruebas innecesarias que no tienen indicación médica o que incluso se desaconsejan por las Autoridades Sanitarias. Es verdad, que nos enfrentamos especialmente a la demanda de pruebas diagnósticas en torno a la Covid-19: PCR, test antigénicos, serologías…pero no podemos transmitir incertidumbres no fundamentadas científicamente, porque generaríamos además falsas expectativas de seguridad y/o malestar psicológico por miedos infundados.Es fundamental que asesoremos no solamente con rigor científico sino sobretodo ético, de forma adecuanda , ayudando a entender las incertidumbres que todavía existen en relación con el virus, su difusión y tratamiento.
- Los servicios de salud laboral debemos realizar un asesoramiento riguroso y cercano cuando se detectan casos sospechosos o se confirma un caso de infección por Covid-19 en algún miembro de la plantilla de la empresa. Se investigarán los posibles contactos estrechos del caso positivo, realizando un rastreo que implica comunicación y asesoramiento (a los trabajadores y a las empresas) , seguimiento y gestión rigurosos de estas situaciones ( comunicación a las autoridades sanitarias, gestión de incapacidad laboral etc).
Los profesionales de la sanidad nos debemos a los códigos deontológicos establecidos y más allá a una ética consensuada, de carácter universal. Es de vital imporancia no perder esta perspectiva ética en nuestro quehacer diario. Debemos procurar siempre hacer lo correcto, buscar el bien y no bajar la guardia al respecto, especialmente en tiempos difíciles.
Por eso invitamos a quienes tengan dudas respecto a los temas sanitarios relacionados con la pandemia a que se pongan en contacto con nuestros especialistas para intentar resolverlas. No lo sabemos todo, nadie lo sabe pero somos honestos en todo aquello de lo que tenemos conocimiento.