La silicosis resurge de forma alarmante  

15 abril, 2025

La silicosis, una enfermedad tradicionalmente asociada a la minería, no sólo no está erradicada, sino que ha comenzado a afectar a nuevos sectores industriales, principalmente en la fabricación de aglomerados de cuarzo y el procesado de piedra natural, como el granito y la pizarra. Así se desprende del informe “La remergencia de la Silicosis en España”, que revela un incremento alarmante de casos en los últimos años, especialmente desde 2007.

Los datos han sido presentados por el Instituto de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST) y el Ministerio de Sanidad en  una jornada técnica sobre el preocupante resurgimiento de la silicosis en España, una enfermedad pulmonar vinculada a la exposición laboral a la sílice cristalina.

El Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) ha registrado 520 nuevos casos de silicosis en 2024. Desde la introducción del actual sistema de notificación (CEPROSS) en 2007, el número total de partes por silicosis asciende a 5.900. Lo más alarmante es que entre 2015 y 2019, los casos aumentaron un 1.423,2% en comparación con el periodo entre 1990 y 1994.

Durante la jornada, especialistas del INSST y otras organizaciones nacionales e internacionales destacaron la necesidad urgente de mejorar las mediciones de sílice cristalina en los entornos laborales. Olga Sebastián García, directora del Centro Nacional de Nuevas Tecnologías del INSST, y Cristina López Salinas, jefa de la Unidad Técnica de Agentes Químicos, subrayaron la importancia de implementar programas de control y prevención más rigurosos, como el Programa Interlaboratorios de Control de Calidad de Sílice Cristalina (PICC-Sil), para monitorear los niveles de exposición.

El informe en datos:

  • 4.418 partes de enfermedad profesional causadas por exposición a sílice cristalina entre 1990 y 2019, con un 96,1% de casos en hombres y un 3,9% en mujeres.
  • El sector de la fabricación de productos minerales no metálicos acumula el 50% de los casos.
  • Las regiones más afectadas son Galicia (32,9%), Castilla y León (14%) y Andalucía (10,3%).
  • Un aumento de casos en trabajadores jóvenes y una disminución en la edad media de los pacientes atendidos por silicosis.
  • La exposición a sílice cristalina está relacionada no solo con la silicosis, sino también con enfermedades respiratorias, cardiovasculares, autoinmunes y cáncer de pulmón.
  • 4.418 muertes por silicosis fueron registradas entre 1990 y 2020, lo que pone de manifiesto la gravedad del problema.
  • El Sistema Nacional de Salud financió el 97,5% de los costes sanitarios derivados de la silicosis entre 1997 y 2020.

Recomendaciones clave del estudio:

  1. Ampliar los estudios sobre la silicosis y otras enfermedades asociadas a la sílice cristalina, para obtener información más precisa sobre la situación médica y legal de los afectados.
  2. Reconocer el origen laboral de los casos de silicosis para una mayor implicación de la Seguridad Social en la financiación de los cuidados médicos.
  3. Expandir el reconocimiento de la silicosis a enfermedades inmunomediadas como la esclerodermia y la artritis reumatoide.
  4. Investigar más a fondo la exposición a la sílice cristalina en mujeres, para comprender mejor la extensión de los riesgos en este grupo.
  5. Fortalecer la vigilancia y el control de los sectores más afectados por la silicosis, como la fabricación de cuarzo y la minería.
  6. Prohibir o regular más estrictamente el uso de aglomerados de cuarzo, siguiendo los ejemplos de países como Australia y California.

El informe concluye con la necesidad urgente de que las autoridades públicas adopten medidas más estrictas para prevenir la silicosis y garantizar la protección de la salud de los trabajadores expuestos a este peligroso agente. El INSST, en su labor científica y técnica, continúa trabajando para crear entornos laborales más seguros y saludables, promoviendo políticas que ayuden a mitigar esta reemergente amenaza para la salud pública.