“Desconectar para conectar”
El Instituto Vasco de Seguridad y Salud laboral (Osalan), ha puesto en marcha la campaña “Desconectar para conectar”, una iniciativa con la que se reivindica el derecho a la desconexión digital, así como la importancia de establecer límites saludables entre el trabajo y la vida personal.
“Desconectar para conectar” surge tras activarse Digitalan, una herramienta diseñada para evaluar la salud digital en el entorno laboral. Los resultados que Digitalan ha proporcionado desde que se inició su uso, ponen de manifiesto que muchas personas trabajadoras necesitan protocolos claros de desconexión digital en sus empresas, para equilibrar el tiempo personal y profesional. Una de las prácticas más comunes que afectan este equilibrio es la recepción y respuesta de correos electrónicos fuera del horario laboral, lo cual puede afectar el bienestar a largo plazo de los empleados.
En total, 2,419 personas evaluaron su salud digital a través de Digitalan, obteniendo los siguientes resultados:
- El 61.55% (1,489 personas) reflejó una salud digital laboral no adecuada.
- El 28.77% (696 personas) obtuvo una puntuación de salud digital poco adecuada.
- Solo el 9.67% (234 personas) mostró una salud digital laboral adecuada.
La falta de protocolos de desconexión digital y la sensación de hiperconexión, junto con la escasa capacitación en el uso adecuado de las herramientas tecnológicas, son parte de las causas que han llevado a que un porcentaje tan elevado de trabajadores ponga en peligro su salud. Por todo ello se hace necesario que las empresas implementen medidas para mejorar el bienestar digital de sus empleados.
La campaña de octubre de Osalan se inspira precisamente en esta necesidad. Su mensaje promueve el derecho de los empleados a desconectarse de las herramientas digitales y de la comunicación laboral fuera de su horario de trabajo, animando a empresas y trabajadores a respetar el tiempo libre y disfrutarlo sin interrupciones laborales.
Además de potenciar el bienestar personal, Osalan señala que una desconexión adecuada también contribuye a un entorno laboral más eficiente y equilibrado. “Desconectar para conectar” invita a valorar la desconexión digital como un elemento esencial del bienestar, destacando que, al desconectar del trabajo, los empleados pueden reconectar con otros aspectos fundamentales de la vida, como la salud, la familia y el disfrute del tiempo libre.